Momentos previos a la salida |
Seríamos un total de 380 los participantes que nos daríamos cita en
el evento, entre todos ellos 17 miembros de nuestro Club, y por delante un
trazado de 38 kilómetros, si bien, pese a la escasa distancia, tendríamos que
superar un desnivel acumulado positivo de 1150 metros, lo cual es un claro
indicativo de la dificultad física del recorrido, si bien la dificultad
técnica la podríamos calificar como media, puntualmente algo más elevada, en
tramos concretos del recorrido.
Pese a la sucesión de días invernales que veníamos teniendo en las
semanas previas, la mañana del domingo amanecía en Riopar fría, con tan solo
1-2 grados, pero la ausencia total de viento la hacía plácida y muy apacible.
El sol trataba de abrirse hueco entre la niebla, si bien ésta poco a poco
cubría la mayor parte del montañoso y bello Valle de Riopar.
Así, en éstas condiciones, a las 10h de la mañana se da el
pistoletazo de salida a todos los participantes.
De salida tendríamos una pequeña vuelta de unos 2 kilómetros a
Riopar, durante ésta tendríamos que superar un empinado repecho, siendo ya
desde el mismo inicio los dos corredores profesionales del WildWolf-Trek
Proracing, Fran Pérez y Juan Pedro Trujillo los encargados de poner el ritmo en
cabeza.
Primeros kilómetros de ascensión |
Así, los primeros kilómetros de ésta subida discurren por pista
ancha y en buen estado, el ritmo es alto, cuartelero en la mayoría de los casos,
en el umbral del dolor y el sufrimiento, ése esfuerzo máximo pero medido que
nos permite escalar a buen ritmo pero que no nos quita el aliento, ese que
necesitamos para lanzar nuestro cuerpo y nuestra bici, metro a metro, pedalada
a pedalada. Superamos ésta primera parte dura y nos lanzamos en un ligero
descenso, pero es una pequeña tregua, y enseguida enlazamos de nuevo con el
Puerto. Aquí cambiamos de firme, la pista ancha por la que transitábamos, pasa
a ser camino estrecho y abrupto, los desniveles aumentan a la vez que lo hace
la dificultad del terreno, aparecen los primeros tramos de barro, nada destacable
y que resulte insalvable, pero todos éstos factores juntos hacen que nuestro
pedaleo se vuelva más sufrido y esforzado, los metros de desnivel y de subida,
pesan como losas, quizás, al que más y al que menos, el terreno duro y exigente que superamos ahora, nos valla recordando los alardes de fuerzas que
fuimos haciendo al inicio del recorrido.
Adrián subiendo un duro repecho del final del Puerto |
Concluimos nuestra escalada por senda, los ánimos del público que
ha subido a vernos hasta arriba nos llevan en volandas los últimos metros, y
salimos a la carretera del Puerto. Por ella transitamos durante unos dos
kilómetros, el collado de las Crucetillas se puede ver al frente, el final se
intuye cerca. Coronamos el Puerto y por caminos nos dirigimos hacia el Cortijo
del Manojal. Llegamos a la barrera de los 1500 metros, la nieve, en algunos
puntos de hasta dos palmos, hace acto de presencia, trazamos con cuidado y
viveza, controlando o tratando de controlar cualquier reacción que tenga
nuestra bici sobre la nieve, helada en gran parte de éste tramo. Pero el carril
trabajado por la organización nos facilita en gran medida las cosas, una
experiencia nueva, una sensación única y bonita, distinta para la mayoría.
Así llegamos al mencionado Cortijo y nos lanzamos en un largo e
impresionante descenso de vuelta hacia Riopar. En un inicio las pendientes son
importantes, varios escalones de roca y piedra nos hacen extremar las
precauciones, pero enseguida el desnivel disminuye ligeramente, el sendero se
vuelve rápido y limpio en la mayoría de sus zonas, disfrutamos de las
sensaciones que tenemos sobre nuestra bicicleta, un merecido premio al esfuerzo
que nos llevó arriba del Puerto.
Así concluimos éste descenso, pasamos de nuevo por Riopar, con algo
más de 20 kilómetros, y ponemos rumbo hacia la segunda parte de la ruta.
Miguel en uno de los tramos de senda |
Lo más duro de la ruta sabemos que ya ha pasado, en nuestro
descenso, primero por pista, nos encontramos algún repecho, alguna ligera
subida, pero volvemos a las sendas, seguimos disfrutando a la vez que nos deslizamos
sobre la montaña con nuestra bicicleta. Los últimos metros están cerca,
llegamos de nuevo a Riopar y, orgullosos y contentos, terminamos.
A nivel deportivo destacar por encima de resultados individuales el
gran papel realizado por nuestro Club en su conjunto, logrando meter entre los
primeros 50 a los 5 integrantes que puntúan en la clasificación por equipos,
así como otros componentes que ayer estuvieron a un buen nivel.
Mikel y Leo, al terminar la prueba |
También destacar el triple podio que obtuvimos de nuevo ayer, con
Lourdes González como 1ª en Master 40, Antonio Toral 2º en Master 30 y Pilar
González 3ª en Elite.
Resaltar también por otro lado los tres 4º que obtuvimos ayer con
Adrián López (a 2´´ del 3º Sub23), Francisco García y Octavio Paya, los cuales
estuvieron a un paso del cajón y que de haberlo logrado hubiera sido todo un éxito para nuestro joven Club, enhorabuena también a todos ellos pues sin
duda os lo merecisteis.
Los resultados detallados han sido los siguientes (a falta de actualizarlos con Juan Santos y Juan León López que también participaron):
Para finalizar, aunque no por ello menos importante, dar la enhorabuena a Riopar por la gran mañana y gran ruta que nos han preparado. Con un gran trabajo en lo alto del Puerto de las Crucetillas para poder dejar un carril practicable entre la nieve. En esos y otros detalles se ha notado el cariño y el empeño con el que han trabajado para que todo saliera bien.
Podio M40 |
Podio M30 |
Pilar 3ª Elite |
No hay comentarios:
Publicar un comentario